¿Cuáles son los idiomas más fáciles de aprender para los hispanohablantes?
Hay muchos motivos por los que una persona quiere aprender un idioma: encontrar un trabajo mejor, poder vivir en el extranjero, hablar el idioma de la persona que le gusta, ver su película favorita sin subtítulos, hacerse entender durante las vacaciones… ¡Existen tantas motivaciones como idiomas!
Pero, seamos prácticos: lo ideal sería dominar un idioma en el menor tiempo posible, ¿no? ¿Es este un objetivo realista? Sí, lo es, y más si te decantas por uno de los idiomas más fáciles de aprender si hablas español. ¡Esperamos poder ayudarte con tu decisión.
Portugués
Tanto el portugués como el español son lenguas románicas. Estas lenguas, entre las que se cuentan otros idiomas, derivaron del latín vulgar que se hablaba en las diferentes regiones del Imperio Romano. Por este motivo, al proceder todas del latín, comparten vocabulario, estructuras gramaticales e incluso características en la pronunciación. Un ejemplo de ello es que el portugués y el español tienen en común muchas palabras que se escriben igual y tienen el mismo significado como abrir, beber, boca y negro, entre otras.
Las estructuras gramaticales de ambas lenguas, sujeto-verbo-predicado, son muy similares: Eu quero uma caipirinha (Yo quiero una caipirinha). La pronunciación del portugués es relativamente sencilla para los hispanohablantes, pero algunos sonidos nasales requieren práctica. Por ejemplo, la terminación “-te” en presente se pronuncia en Brasil “-chi”, mientras que la terminación “-de”, como en grande, se pronuncia “-dlli”.
También es importante tener en cuenta qué variedad de portugués se estudia: el portugués de Portugal o el de Brasil. En general, para los hispanohablantes, el acento de Brasil puede ser más fácil de entender porque su pronunciación es más clara. Y, finalmente, en cuanto a la exposición de este idioma, hay que destacar que la música brasileña está muy presente en la cultura pop, así que tendrás más oportunidades de escuchar esta variedad del portugués. Quer aprender a cantar “Garota de Ipanema”?
Italiano
El segundo idioma de nuestra lista es el italiano. ¿No es una gran sorpresa, verdad? Seguro que, al menos en la forma escrita, entiendes mucho italiano sin tener ningún conocimiento de este idioma. Y es que, como el portugués, el italiano también es una lengua románica. Prueba de la gran similitud léxica entre el italiano y el español son estas palabras que son muy parecidas y significan exactamente lo mismo: per favore (por favor), grazie (gracias) o probabile (probable), entre muchas otras. En español también se utilizan muchas palabras que son originarias del italiano, como, por ejemplo, novela, fiasco, paparazzi o bancarrota. Es decir, el aprendizaje del vocabulario es una tarea relativamente fácil.
La pronunciación italiana es sencilla, pero hay que tener en cuenta algunas diferencias con el español como, por ejemplo, la pronunciación de la “c”: cuando la letra “c” precede a las vocales “e” o “i”, se pronuncia “chi” o “che”, como en città o certezza.
Como curiosidad, los italianismos están particularmente presentes en el habla coloquial de Argentina y Uruguay debido a la inmigración italiana en ambos países. “Hoy no laburo” en italiano es Oggi non lavoro. ¿Se parecen, verdad? ¿Te has quedado con ganas de aprender italiano? Dai, è molto facile!
Francés
Teniendo en cuenta que aproximadamente 274 millones de personas hablan francés como lengua nativa y que es la segunda lengua en las relaciones internacionales, por detrás del inglés, es una buena idea aprender este idioma. Se estima que el español y el francés tienen alrededor de un 70 % de similitudes lingüísticas.
La pronunciación del francés puede ser algo complicada, ya que esta lengua no se pronuncia tal y como se escribe y existen algunos sonidos nasales que no forman parte del inventario sonoro del español. Sin embargo, aprender vocabulario es una tarea relativamente fácil, ya que se encuentran muchas palabras parecidas en ambas lenguas.
Aquí algunos ejemplos: tomate (tomate), applaudir (aplaudir) o jambon (jamón). En lo referente a la construcción de oraciones básicas, la estructura es la misma (sujeto-verbo-predicado): Ils parlent anglais et français (Ellos hablan inglés y francés).
El francés también tiene algunos acentos más que el español: el acento agudo en télévision, el acento grave en poème, el circunflejo en hôpital y la diéresis en naïve. ¡Y no nos podemos olvidar de la ç, la c cedilla, como en garçon (muchacho)!
Hay también que destacar que la influencia del francés está muy presente en diferentes ámbitos: la moda, la gastronomía, el arte… ¿Sabías que palabras como blusa, fresa o bricolaje provienen del francés? Oui ou non?
Catalán
El catalán no solo se habla en Cataluña, sino también en las Islas Baleares, Andorra, la Comunidad Valenciana, en la región francesa del Rosellón y en la ciudad italiana de Alghero. Como sucede con el portugués o el italiano, el catalán, en la lengua escrita y a menudo en la lengua oral, tiene muchas similitudes con el español.
Aquí algunos ejemplos de cognados, palabras que tienen el mismo origen y son similares en su ortografía: habitació (habitación), verd (verde), ajuda (ayuda). Sin embargo, ¡atención a los falsos amigos! Acostar significa en catalán “acercar” y cama significa “pierna”.
La pronunciación del catalán y del francés se asemeja. Por ejemplo, el sonido de la “g” en genial es parecido al de la “j” en bonjour. Otra diferencia a tener en cuenta es que la letra ñ no existe en catalán y se substituye por ny: Espanya (España), muntanya (montaña). I tu, parles català?
Rumano
Muchas personas desconocen que el rumano es la quinta lengua románica más hablada en la Unión Europea, por detrás del español, el portugués, el francés y el italiano. El rumano es la lengua románica más parecida al latín, de la cual ha mantenido gran parte de su estructura gramatical, así como mucho de su vocabulario: casă (casa), vin (vino). Sin embargo, cabe destacar que el rumano también está fuertemente influenciado por las lenguas eslavas.
La pronunciación del rumano es sencilla para los hispanohablantes, ya que el alfabeto rumano es casi completamente fonético, es decir, se pronuncia tal y como se escribe, pero hay algunas excepciones.
Por ejemplo, la vocal “ă” se pronuncia /ə/, como al final de la palabra flower en inglés. En rumano, los adjetivos también concuerdan, como en español, con el género y el número del sustantivo al que se refieren: Un profesor bun es “Un profesor bueno”. ¿Sabes cómo se dice “hola” en rumano? Salut!
Inglés
Se suele pensar que el inglés es un hueso difícil de roer si hablas español, pero, realmente, el español y el inglés tienen muchas similitudes. Para empezar, la gramática es bastante más sencilla que la del español. Pongamos como ejemplo la conjugación de los verbos en presente: I work, you work, he/she/it works, we work, they work, you work. ¡El verbo apenas cambia! ¿Fácil, no?
También existen muchísimos cognados entre el inglés y el español: actor, animal, bar, cable, chocolate… la lista es interminable. Además, el inglés está muy presente en nuestro día a día, ya que utilizamos muchos anglicismos: vídeo, marketing, chat, e-mail, entre muchas otras palabras.
La mayor diferencia entre el español y el inglés es quizás la pronunciación, ya que, por ejemplo, las consonantes “h”, “r” o la “z” suenan diferente que en español. No obstante, dada la gran cobertura que tiene el inglés en los países hispanos, no debería ser un problema mejorar la pronunciación viendo todas las series y películas en inglés que tenemos al alcance o escuchando la música que nos gusta. Y si estos motivos no acaban de convencerte, siempre nos quedará el spanglish.